Hoy a acudido nuestra primera linfangitis del verano, pues en esta época aumenta la incidencia de las complicaciones de los pacientes con problemas linfáticos.
Se trata de una paciente que presentó hace unos día un cuadro etiquetado de tromboflebitis y posteriormente de celulitis, por e que tuvo que ser ingresada en el Hospital.Presentaba un lipe-linfedema crónico y a raíz de una pequeña infección por hongos a nivel del primer espacio interdigital del pie izquierdo, que ha actuado como puesta de entrada y se le ha producido una infección bacteriana de sistema linfático.
Aqui a la izquierda en la 1º foto vemos las piernas de la paciente cuando todavía no presentaba la tromboflebitis,y en las fotos de la derecha se aprecia en la linfangitis en la pierna izquierda de la paciente. Las piernas con problemas linfaticos son muy delicadas frente a las infecciones , por eso es importante tener un pronto diagnostico.
Una de las principales complicaciones de los linfedemas son los cuadros de linfangitis aguda, denominados según la terminología aprobada por la Unión Internacional de Linfología dermatolinfangioadenitis. Debido a la disminución de la inmunidad provocada por el linfedema ( recordemos que el sistema linfático es factor fundamental para la defensa contra las infecciones ) cualquier alteración a nivel de la piel puede ser puerta de entrada para gérmenes ( tanto hongos como bacteria ) dando lugar a una infección local que rápidamente se extenderá por el sistema linfático hasta los ganglios produciendo un cuadro infeccioso local que pronto se generalizará provocando bacteriemia ( entrada de bacterias en el torrente sanguíneo ) con fiebre alta y gran inflamación local ( enrojecimiento, hinchazón, calor y dolor ).
La prevención y tratamiento de las linfangitis son parte de la rutina de los cuidados de los pacientes linfáticos pues con cada nueva infección linfática se altera aún más el sistema linfático. Los cuidados rutinarios de la piel, higiene e hidratación diaria y la actuación temprana ante cualquier mínimo signo de infección son pilares básicos del tratamiento de los linfedemas.
Puesto que la puerta de entrada más frecuente son las infecciones micóticas a nivel de los pies y dado que estas son más frecuentes debido a la alteración linfática, la prevención de las mismas es fundamental con la higiene adecuada de los pies, el secado rutinario entre los dedos para evitar humedad y la auto inspección frecuente.
El tratamiento antibiótico vía oral prolongado ante cualquier signo de infección debe prolongarse unos quince días, pues los gérmenes pueden quedar estancados en el sistema linfático que no tiene un drenaje adecuado (trombo- linfangitis)
En cuadros de linfangitis establecida con fiebre alta e importantes signos inflamatorios las bacterias más frecuentemente implicadas son el estafilococo y el estreptococo por lo que el tratamiento inicial lo hacemos con amoxicilina-clavulánico y en el caso de que debamos mantenerlo más allá de las dos semanas ( que es lo habitual ) seguimos con penicilinas de depósito intramuscular que nos permiten tratamientos prolongados sin los inconvenientes de mantener durante tanto tiempo los antibióticos vía oral.